La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales oficializa su aprovechamiento en altamar para reducir su impacto ambiental y económico.
La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) anunció este 6 de agosto la inclusión oficial del sargazo como recurso pesquero, permitiendo su recolección en altamar antes de que llegue a las costas del Caribe mexicano. Esta medida busca reducir los efectos negativos de la acumulación de la macroalga en ecosistemas, turismo y economía local.
La actualización de la Carta Nacional Pesquera, publicada en el Diario Oficial de la Federación, reconoce al sargazo flotante (holopelágico) como un recurso aprovechable. La normativa autoriza la recolección mediante permisos de pesca de fomento, con embarcaciones especializadas, como el buque sargacero oceánico ARM Natans BSO-101, diseñado por la Secretaría de Marina. Este buque puede extraer hasta 250 toneladas de sargazo y operar en altamar por cinco días, evitando su llegada a las playas.
El sargazo holopelágico es una macroalga marina de color pardo que flota en el océano Atlántico y el Caribe. Entre las especies que afectan a México están Sargassum natans I, Sargassum natans VIII y Sargassum fluitans III. Estas algas forman balsas en la superficie marina que sirven de refugio a diversas especies, pero su excesivo crecimiento impacta negativamente en los ecosistemas, el turismo y la economía local.
Con esta medida, el sargazo podrá ser aprovechado como materia prima en industrias como fertilizantes orgánicos, suplementos alimenticios para animales, biocombustibles, bioplásticos, materiales de construcción, fibras textiles, tintes y purificadores de agua. Actualmente, la biomasa recolectada en el Caribe mexicano varía entre 13 mil y 63 mil toneladas anuales, con un pico en 2022, principalmente de abril a agosto.
Estudios satelitales estiman que en promedio hay casi 10 millones de toneladas húmedas de sargazo flotante en el Caribe occidental, de las cuales se pueden recolectar de forma sustentable hasta 945 mil toneladas por año. La regulación actual establece permisos bajo el artículo 24 de la Ley General de Pesca y Acuacultura Sustentables, sin cuotas fijas, pero con requisitos técnicos para evitar daños ambientales.
Las autoridades recomiendan respetar las balsas neustónicas, que contienen fauna marina importante, y evitar métodos que arrastren fauna acompañante. Se implementarán investigaciones científicas para determinar cuotas, establecer un plan de manejo y monitorear el recurso mediante tecnología satelital, con el fin de optimizar su aprovechamiento sin comprometer el ecosistema.
La incorporación del sargazo como recurso pesquero representa un cambio en la estrategia de México para enfrentar este fenómeno, promoviendo su aprovechamiento sustentable y contribuyendo a reducir su impacto negativo en las playas, ecosistemas y economía turística del país.
Para mayor información, consulte la actualización oficial en: https://lc.cx/htXzxb