Encuestas nacionales de julio de 2025 muestran un descenso en la aprobación de la presidenta Claudia Sheinbaum. Diversos factores políticos y escándalos recientes podrían estar influyendo en la percepción ciudadana.
A casi un año de asumir la Presidencia de México, la aprobación de Claudia Sheinbaum ha mostrado una tendencia a la baja en diversos estudios demoscópicos nacionales publicados durante julio de 2025. Si bien su respaldo popular se mantiene en niveles considerables en algunas mediciones, la disminución general en su popularidad es un fenómeno que se ha reflejado en al menos cuatro ejercicios estadísticos.
Aunque las encuestadoras no ofrecen un análisis exhaustivo sobre los factores específicos que inciden en esta caída de la aprobación de Claudia Sheinbaum, este retroceso coincide con la emergencia de diversos escándalos políticos. Entre ellos destaca el caso de Hernán Bermúdez, exsecretario de Seguridad en Tabasco, quien actualmente enfrenta acusaciones de liderar una organización criminal.
Análisis de las principales encuestas
El más reciente estudio de Statistical Research Corporation (SRC) sitúa la aprobación de Claudia Sheinbaum en 67.2% en julio de 2025. Esta cifra representa una disminución de 12 puntos porcentuales en comparación con la medición de mayo, cuando alcanzó 79.3% de aprobación. La desaprobación también experimentó un incremento significativo, pasando de 22.5% en abril a 32.8% en julio. La serie histórica de SRC, que abarca mediciones desde octubre de 2024, indica que esta es la segunda peor evaluación desde el inicio de la actual administración. Para este estudio, SRC realizó 32,000 llamadas telefónicas a personas mayores de 18 años en México entre el 23 y el 26 de julio de 2025, con un margen de error de ±3.8% y un nivel de confianza del 95%.

Por su parte, la firma México Elige también documentó un retroceso en la aprobación presidencial de 1.5 puntos, pasando de 58.8% en junio a 57.3% en julio. Adicionalmente, la calificación ciudadana promedio otorgada a la mandataria disminuyó de 52.7 a 51.3 puntos, reflejando una caída en la percepción general de su desempeño gubernamental. Las opiniones de los encuestados se encuentran divididas, con un 35.5% evaluando su gestión como “pésima” y un 35.8% como “excelente”. Este sondeo se llevó a cabo del 8 al 11 de julio de 2025, con una muestra de 2,093 ciudadanos mexicanos mayores de 18 años con acceso a plataformas de Meta Inc., un margen de error de ±3.3% y un nivel de confianza del 95%.

Los datos de El Financiero también muestran una pérdida en la aprobación de Claudia Sheinbaum, que descendió de un máximo de 85% en febrero a 76% en junio de 2025. Si bien este nivel sigue siendo considerable, representa una caída acumulada de 9 puntos porcentuales en solo cuatro meses. La desaprobación, en contraste, ha permanecido relativamente estable, fluctuando entre 15% y 22%. La encuesta telefónica nacional de El Financiero se realizó del 5 al 9 y del 19 al 23 de junio de 2025, con una muestra de 1,000 adultos mexicanos, un margen de error de ±3.1% y un nivel de confianza del 95%.

Finalmente, la plataforma Polls MX, que genera un promedio ponderado de encuestas mediante un modelo bayesiano dinámico, registró una disminución de 2 puntos en la aprobación de Claudia Sheinbaum entre junio y julio, pasando de 77% a 75%. En cuanto a la desaprobación, la gráfica de Polls MX evidencia un ligero aumento, de 19% en marzo a 24% en julio. Aunque este promedio se mantiene por encima de otros ejercicios, refleja un cambio de tendencia a la baja después de meses de estabilidad en niveles cercanos al 80%.

Factores que influyen en el declive
La disminución en la aprobación de Claudia Sheinbaum no se produce de forma aislada. En los últimos meses, diversos acontecimientos han impactado la imagen del Gobierno Federal y del partido Morena ante la opinión pública. Uno de los casos más sensibles es el de Hernán Bermúdez Requena, exsecretario de Seguridad de Tabasco, señalado por presuntamente liderar “La Barredora”, una célula vinculada al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
El nombramiento de Bermúdez por Adán Augusto López, actual coordinador de Morena en el Senado y figura cercana al expresidente Andrés Manuel López Obrador, ha generado cuestionamientos sobre una posible red de protección que habría permitido su permanencia en el cargo durante años, incluso a pesar de que reportes de inteligencia militar ya lo tenían bajo investigación. Bermúdez se encuentra actualmente prófugo y con una ficha roja de Interpol, y este escándalo ha evidenciado fisuras dentro del denominado “Grupo Tabasco”, así como conflictos internos entre el gobernador Javier May y otras figuras relevantes del lopezobradorismo, incluyendo la familia del exmandatario.

A este escenario se suman las crecientes advertencias desde Estados Unidos sobre presuntos vínculos entre el narcotráfico y altos funcionarios de Morena. El retorno de Donald Trump a la Casa Blanca ha endurecido el discurso bilateral, con él y miembros de su gabinete acusando públicamente a México de estar infiltrado por el crimen organizado. La colaboración judicial en el caso de Ovidio Guzmán ha generado expectativas de que nuevos nombres podrían surgir en los próximos meses. Esta narrativa de un “narcogobierno”, alimentada por declaraciones, filtraciones y reportajes, ha afectado no solo el legado del sexenio anterior, sino también el inicio de la administración de Claudia Sheinbaum.
Adicionalmente, en semanas recientes, una ola de críticas surgió a raíz de la divulgación de imágenes de legisladores y funcionarios morenistas vacacionando en destinos europeos de lujo, como Ibiza, Lisboa, Capri y Madrid. Las fotografías de figuras como Enrique Vázquez, Mario Delgado, Ricardo Monreal y Andrés Manuel López Beltrán en hoteles, restaurantes y clubes de alto nivel contrastan con el discurso de austeridad promovido por la llamada Cuarta Transformación. Aunque muchos de los involucrados defendieron sus viajes como actividades personales y legales, la percepción de desconexión con la ciudadanía ha calado en la opinión pública. La presidenta Sheinbaum, aunque ha evitado confrontar directamente a los involucrados, ha insistido en que el movimiento debe mantener la humildad y la cercanía con el pueblo. Mientras tanto, las encuestas continúan mostrando una disminución en su aprobación, generando interrogantes sobre si su discurso será suficiente para contener el desgaste político que enfrenta su gobierno.