Andrés Manuel López Obrador anunció su intención de llevar a cabo dos reformas cruciales en el artículo 123 de la Constitución antes de finalizar su administración. La primera tiene como objetivo evitar que los aumentos al salario mínimo queden rezagados frente a la inflación. Asimismo, expresó su determinación de revisar la reforma laboral implementada durante el mandato de Ernesto Zedillo.

Durante la ceremonia cívica conmemorativa del 117 aniversario de los Mártires de Río Blanco, el presidente de México señaló la necesidad de proponer cambios significativos, criticando la actual legislación laboral como inhumana e injusta. Hizo hincapié en la situación desfavorable para los trabajadores que, tras décadas de servicio, se retiran sin recibir, debido a la reforma vigente, ni siquiera su salario íntegro, sino la mitad, en el mejor de los casos.

Además, AMLO lamentó la falta de incremento en el salario mínimo durante el periodo que consideró como neoliberal, de 1983 a 2018. Destacó la urgencia de revertir la pérdida del poder adquisitivo del salario mínimo, que durante esos 36 años alcanzó el 70%, subrayando que incluso con los aumentos implementados en su gobierno, aún no se recupera completamente el poder de compra.

«En 36 años hubo una pérdida del poder adquisitivo del salario mínimo del 70 por ciento. Tan es así, que en 1980 el salario mínimo alcanzaba para comprar 50 kilos de tortilla, 1980, y cuando nosotros llegamos a la Presidencia apenas alcanzaba el salario mínimo para comprar cinco kilos de tortilla», reprochó el jefe del Ejecutivo.