La Guardia Nacional nació como una reestructuración a la policía federal, que estaba profundamente corrompida y llego a las manos del querido presidente y soberano AMLO en estado de putrefacción, su primer acto en este rubro fue disolverla y formar a la Guardia Nacional como sustituto de la policía federal y esta fuerza se consolidó como la fuerza de la presidencia, pues ya sean desastres naturales, violencia o procesos de desarrollo social AMLO las usó como su mano en el país.

Fue bastante controvertida la decisión de utilizar a las fuerzas armadas como herramienta de desarrollo social, construyendo aeropuertos, trenes y han estado involucrados en la construcción y mantenimiento de escuelas, hospitales, y clínicas en diversas partes del país. Lo cual me parece muy interesante, pues si vemos a nuestro «ejemplo a seguir» Estados Unidos, ellos utilizan las fuerzas armadas con fines bélicos al rededor del mundo por diferentes motivos, pero este gasto representa el 15% del PIB.

Para Estados Unidos, las fuerzas armadas generan una fuga de capital muy importante en su presupuesto, dinero que se gasta en balas, bombas y en las armas necesarias para detonarlas. Lo cual no genera un beneficio directo a la ciudadanía, pero aun así se sigue aumentando el presupuesto para este rubro. México liderado por AMLO tomo una dirección completamente diferente a Estados Unidos, decidió utilizar ese presupuesto y esa fuerza en una herramienta de desarrollo social, exigiendo al propio sistema de las fuerzas armadas a ser especializado en su capacitación educativa, pues ahora los objetivos de estas exigen una preparación educativa alta. Como es la construcción y dirección de un aeropuerto, por ejemplo.

Las fuerzas armadas ahora con este enfoque de desarrollo social se desarrolla económicamente y educativamente, consolidándolas como una fuerza de desarrollo económico que se beneficia al educar a sus elementos y darles empleos que podrían considerarse civiles. Pero bajo la dirección y organización de las fuerzas armadas. Esto ha provocado que el gasto en seguridad nacional deje de ser un gasto y se convierta en una inversión. Aun así, este Camaleón tiene el deber de presentarles la otra cara de la moneda.

El hecho que el gobierno de México esté tomando posesión de medios de producción, significa que cada día nos alejamos más del neoliberalismo que tanto sataniza la 4T, pues antes los aeropuertos se construían con el sector privado en contratos multimillonarios, donde el gobierno financiaba su construcción y el sector privado se encargaba de todo lo demás. Este proceso está podrido, pues la corrupción era el estado natural de estos tratos y el pueblo pagaba estos contratos junto con la corrupción que los presidía.

No sé si recuerden nuestros queridos lectores que AMLO cancelo un contrato de un aeropuerto al iniciar su mandato, bueno esto se debe a que este generaba una fuga de capital a beneficio de los intereses de la cúpula del poder que le hizo la vida de cuadritos para no permitir que su cosmovisión política tomará poder, y después de cancelar este contrato tomó a las fuerzas armadas y les pidió que sacarán adelante un aeropuerto el cual hoy conocemos como el AIFA.

El país se dirige a una estructura económica donde el gobierno posee los medios de producción, pues con la fuerza de desarrollo de las fuerzas armadas aunado a la búsqueda del gobierno de poseer medios de producción, el estado se convierte poco a poco en la empresa más importante de nuestra economía recordándonos estructuras económicas similares a la Unión Soviética o a la actual China.

Consideró que estamos en el lado correcto de la historia, pues esta economía con enfoque socialista es la que más frutos está dando en la modernidad, pues el capitalismo es evidenciado como un cáncer que mata poco a poco al país. Comparemos hoy a China y Estados Unidos, abran los ojos a esta nueva realidad, una realidad donde el estado controla a los medios de producción y es más eficiente que la mano invisible.

Este primer intento de acercar nuestra economía al socialismo se consolidará con la fusión de la Guardia Nacional con SEDENA, pues ahora SEDENA será la institución que fundamentalmente controlará el poder de la fuerza y poco a poco se convertirá en la fuerza económica del estado. Como dije en un principio, la Guardia Nacional es la mano de la presidencia en el país, esta mano ahora sustituirá a la mano invisible de Adam Smith, y ahora ya no será tan invisible.