Los líderes del Cártel de Sinaloa fueron arrestados en El Paso, Texas, en una operación encubierta del FBI.
Ismael «El Mayo» Zambada García, uno de los líderes más notorios del Cártel de Sinaloa, y Joaquín Guzmán López, hijo de Joaquín «El Chapo» Guzmán, fueron detenidos el pasado jueves en El Paso, Texas. La captura se llevó a cabo mediante una operación encubierta del FBI, que logró engañarlos para que volaran a Estados Unidos bajo el pretexto de una inspección de propiedad en México.
Zambada, de 76 años, ha sido una figura central en el narcotráfico internacional durante más de cuatro décadas, eludiendo la captura a través de una combinación de sobornos y una baja visibilidad. Su capacidad para evitar el arresto ha sido una de las razones por las que se ha mantenido como un pilar del Cártel de Sinaloa, una de las organizaciones criminales más poderosas del mundo.
El Departamento de Justicia de EE.UU. informó que Zambada y Guzmán López enfrentan múltiples cargos relacionados con la fabricación y tráfico de fentanilo, una droga altamente letal que ha contribuido significativamente a la crisis de opioides en Estados Unidos. «El fentanilo es la amenaza más mortífera a la que se ha enfrentado jamás nuestro país, y el Departamento de Justicia no descansará hasta que todos y cada uno de los líderes, miembros y asociados de los cárteles responsables del envenenamiento de nuestras comunidades rindan cuentas», declaró el secretario de Justicia de EE.UU., Merrick Garland.
La operación que llevó a la captura de estos dos líderes del narcotráfico fue meticulosamente planificada. Ambos fueron convencidos de abordar un avión con destino a una supuesta inspección en México, pero en realidad se dirigían a El Paso, Texas. Al aterrizar, agentes del FBI los detuvieron inmediatamente. Esta táctica demuestra el nivel de sofisticación y coordinación alcanzado por las autoridades estadounidenses en su lucha contra el narcotráfico.
Impacto en el Cártel de Sinaloa
La detención de «El Mayo» y Guzmán López representa un golpe significativo para el Cártel de Sinaloa. Zambada, conocido por su discreción y capacidad para manejar operaciones financieras complejas del cártel, es considerado el verdadero líder del grupo, mientras que Guzmán López ha sido una figura importante en las operaciones de tráfico de fentanilo. Esta captura podría desestabilizar temporalmente la estructura de liderazgo del cártel y afectar sus operaciones.
Reacciones y futuro
La captura ha sido bien recibida por las autoridades de ambos países, quienes consideran este evento como un paso importante en la lucha contra el narcotráfico. Sin embargo, la historia sugiere que el vacío de poder dejado por la detención de líderes prominentes puede dar lugar a conflictos internos y luchas por el control dentro del cártel. Las autoridades estarán vigilantes ante cualquier indicio de violencia o reorganización en la jerarquía del Cártel de Sinaloa.