El día de ayer 27 de junio del 2024 fue el debate presidencial de la supuesta economía más grande del mundo, Estados Unidos, en donde pusieron a un convicto de 78 años y a un hombre de 81 con demencia en el debate que definirá el futuro de la nación americana. Y pues, si esas son las dos mejores opciones de presidencia del país más importante del mundo, talvez estamos presenciando la decadencia del imperio americano.

Joe Biden, actual presidente de Estados Unidos, constantemente se estuvo tropezando con sus propias palabras y en algunas ocasiones sus respuestas no tenían sentido o estaban fuera de contexto. Evidenciando lo que todos ya sabíamos, un pobre estado de salud mental del presidente Joe Biden, en donde se pierde en sus discursos, está desorientado y pues simplemente es un viejito de la tercera edad, este es un mensaje para los demócratas. ¡Ya déjenlo descansar al pobre! Esto puede ser considerado explotación de personas de la tercera edad.

Donald Trump, por otro lado, se mantuvo confiado a lo largo de todo el debate, incluso ofendió el estado de salud mental de su contrincante, Trump principalmente fue cuestionado por los moderadores del debate, en donde mencionaban hechos sobre la administración de ambos y luego preguntaba sobre esos datos, al mismo tiempo lo cuestionaron con las estrategias que tomaría respecto a economía, inmigración y guerra.

Lo que pudimos presenciar durante todo el debate fue «todo estaba excelente, nada más llego Biden y lo arruino todo», Donald Trump en todo momento rechazó cualquier crítica con un comentario audaz sobre lo bien que iba durante su mandato y toda cuestión negativa del país la dirigía a su contrincante. Se espera un presidente sumamente agresivo con la inmigración y uno que busque proliferar el capital a su máxima comprensión.

Estamos presenciando la decadencia del imperio americano, vemos como poco a poco sus dirigentes se radicalizan y como la economía China toma terreno sobre ellos, mientras China está dirigiendo la nueva economía con orientación socialista al éxito, Estados Unidos está debatiendo entre elegir a un paciente de demencia y a un convicto para su presidencia, los imperios más o menos duran 250 años, y Estados Unidos tiene 248, son tiempos de cambio y el capitalismo está perdiendo. Siguiendo de cerca la caída del imperio, su camarada Camaleón se retira.