Nicolás Maduro es declarado vencedor en medio de denuncias de fraude y cuestionamientos internacionales sobre la transparencia del proceso electoral.
Nicolás Maduro fue declarado ganador de las elecciones presidenciales en Venezuela, celebradas el 28 de julio de 2024. El Consejo Nacional Electoral (CNE) anunció su victoria con un 51% de los votos, un resultado que ha sido ampliamente disputado tanto por la oposición interna como por diversas naciones y organizaciones internacionales.
Las elecciones de 2024 en Venezuela ocurrieron en un contexto de profunda crisis sociopolítica y económica. El país ha estado bajo el liderazgo de Nicolás Maduro desde 2013, un periodo marcado por hiperinflación, escasez de bienes básicos y migración masiva. Las elecciones se llevaron a cabo tras la firma del Acuerdo de Barbados en 2023, que buscaba garantizar la transparencia electoral, aunque varias denuncias señalan que este acuerdo fue repetidamente violado por el gobierno.
Antony Blinken, secretario de Estado de Estados Unidos, expresó serias preocupaciones sobre la transparencia de las elecciones, sugiriendo que los resultados no reflejan la voluntad del pueblo venezolano. En línea con esto, el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, instó a Venezuela a asegurar un proceso electoral transparente y verificable. Líderes de países como Argentina, Chile, Perú y Colombia también manifestaron su desconfianza en los resultados y pidieron una auditoría independiente de los votos.
Desde la apertura de las urnas, se reportaron diversas irregularidades, incluyendo el uso de recursos estatales para la campaña de Maduro y la intimidación de votantes y candidatos opositores. La oposición denunció que en varios centros de votación, sus testigos fueron forzados a retirarse, y acusaron al CNE de manipular los resultados para favorecer a Maduro. Además, hubo reportes de detenciones arbitrarias y amenazas contra aquellos que mostraron apoyo a candidatos opositores.
Reacciones internacionales
La comunidad internacional reaccionó de manera dividida ante los resultados. Países como China, Rusia e Irán felicitaron a Maduro por su reelección, mientras que naciones como Estados Unidos, España y varios países latinoamericanos rechazaron los resultados y pidieron una revisión exhaustiva del proceso electoral. El presidente argentino, Javier Milei, fue uno de los críticos más vocales, llamando abiertamente a no reconocer lo que consideró un fraude electoral.
Situación actual
A pesar de las denuncias y las críticas, Nicolás Maduro fue declarado vencedor y se prepara para asumir un nuevo mandato de seis años. Mientras tanto, la oposición y varios actores internacionales continúan presionando para una auditoría independiente que pueda esclarecer las numerosas irregularidades señaladas durante el proceso electoral. La situación en Venezuela sigue siendo tensa y la legitimidad del gobierno de Maduro está en entredicho tanto dentro del país como en el escenario internacional.