El país registra un incremento del 3% en las víctimas de homicidio en comparación con 2023, con aumentos en varias entidades, incluido la Ciudad de México
Durante 2024, México experimentó un incremento en el número de homicidios en comparación con el año anterior, marcando un cambio en la tendencia a la baja que se había consolidado en años recientes. De acuerdo con cifras preliminares del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en el país se registraron 33 mil 241 víctimas de homicidio durante todo el año, lo que representa un aumento del 2.9 por ciento respecto a 2023, cuando se contabilizaron 32 mil 278 casos. Este repunte en la violencia homicida constituye una señal de alarma en un contexto donde, desde 2020, las cifras venían disminuyendo progresivamente tras un aumento en 2020, año marcado por la pandemia de COVID-19.
El informe del INEGI revela que la principal causa de estos homicidios fue el uso de armas de fuego, responsables del 71.8 por ciento de los casos. En segundo lugar, se ubicaron las armas u objetos punzocortantes, presentes en el 9.3 por ciento de los incidentes. La tasa nacional de homicidios en 2024 alcanzó 25.6 por cada 100 mil habitantes, superior a la tasa de 24.9 registrada en 2023, evidenciando un aumento en la incidencia de la violencia letal en el país.
Analizando las cifras por género, la tasa de homicidios en hombres fue de 46.0 por cada 100 mil en 2024, lo que implica un incremento respecto a 44.8 en 2023. La tasa en mujeres se mantuvo prácticamente igual, en 5.6 por cada 100 mil habitantes, con una ligera disminución respecto a la cifra del año previo, que fue de 5.7. Estas cifras reflejan que, aunque la violencia continúa siendo predominantemente masculina, la violencia en mujeres mantiene una tendencia estable.
Por entidad federativa, Guanajuato se consolidó como el estado con mayor número de homicidios en 2024, con 4 mil 15 casos, lo que representa el 12 por ciento del total nacional. Le sigue el Estado de México, con 3 mil 277 casos, y en tercer lugar se ubica Baja California, con un incremento significativo en sus cifras. Sin embargo, los aumentos no se distribuyen de manera homogénea en todo el territorio, pues en 16 de los 32 estados del país se registraron incrementos en el número de homicidios. Guerrero, por ejemplo, mantuvo cifras similares, con una diferencia mínima de un homicidio más en 2024 respecto a 2023.
Destaca también el caso de Sinaloa, que desde septiembre registró un incremento en la violencia relacionada con la pugna entre los grupos liderados por Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo”, e Ismael Zambada, “La Chapiza” contra “La Mayiza”. Sin embargo, la situación más alarmante se presenta en Tabasco, estado natal del expresidente Andrés Manuel López Obrador, donde los homicidios aumentaron un 66 por ciento, pasando de 278 en 2023 a 838 en 2024. Este incremento representa una tendencia preocupante en una región que, además, ha sido escenario de distintas disputas por el control del crimen organizado.
Colima, considerado uno de los estados con mayor violencia, también evidenció un aumento en los homicidios, con un incremento del 1.22 por ciento en 2024. La tasa de homicidios en esta entidad se ubicó en 122 por cada 100 mil habitantes, frente a la media nacional de 25.6. Aunque los números absolutos aumentaron ligeramente, la tasa refleja una situación de alta vulnerabilidad en comparación con otros estados. La tendencia en estos estados evidencia que la violencia sigue siendo un problema grave, con impactos diferenciados en distintas regiones del país.
El informe del INEGI se basa en los certificados de defunción, que permiten un análisis más completo y objetivo sobre las causas de muerte. La metodología utilizada distingue entre homicidio, accidente y suicidio, considerando las causas de la defunción, el tipo y el motivo de la lesión reportados en el certificado médico. Esto garantiza una mayor precisión en la clasificación y un mejor entendimiento del contexto de cada caso.
A nivel nacional, el aumento en los homicidios en 2024 puede atribuirse a diversos factores, incluyendo la fragmentación de las organizaciones criminales, disputas territoriales y fallas en la estrategia de seguridad pública. En las principales ciudades, como la Ciudad de México, también se registraron incrementos: en la capital, los homicidios aumentaron un 23.2 por ciento, pasando de 750 en 2023 a 978 en 2024. En el Estado de México, el incremento fue de 10.22 por ciento, al pasar de 2 mil 942 a 3 mil 277 casos en el mismo periodo.
El análisis de las cifras de los primeros días de 2025 indica que la violencia homicida continúa vigente. En el primer día del año, se reportaron 60 homicidios en todo el país, y en los primeros cinco días, la cifra alcanzó 322 casos. Entre enero y abril de 2025, se han registrado 7,545 homicidios dolosos, con un promedio diario de 62.8 casos. Aunque esta cifra representa una reducción del 32.9 por ciento respecto a septiembre de 2024, la violencia sigue siendo una problemática persistente.
Asimismo, las estadísticas preliminares señalan que, entre enero de 2024 y abril de 2025, los homicidios dolosos cayeron en promedio un 28.1 por ciento. Sin embargo, la violencia contra policías también ha aumentado, con 232 agentes asesinados en ese periodo, un incremento del 30 por ciento respecto al mismo lapso del año anterior. Estos datos reflejan que, a pesar de ciertos avances en la reducción de homicidios en algunas regiones, la inseguridad continúa siendo un problema de gran magnitud en México.
El informe del INEGI ofrece una visión complementaria y a veces contrastante con las cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, permitiendo un análisis más completo y objetivo del escenario de violencia en el país. La importancia de estos datos radica en ofrecer una medición independiente que ayuda a entender mejor la dimensión real del problema y a diseñar estrategias más efectivas para su atención.