Perfil de las amistades y negocios del cercano a López Beltrán en su viaje a Tokio
Andrés Manuel López Beltrán, conocido como “Andy”, quien ocupa el cargo de secretario de Organización de Morena, ha generado controversia por su reciente desplazamiento a Tokio, Japón, en un momento en que su partido enfrenta una crisis debido a acusaciones contra perfiles de alto nivel por presunta corrupción o vínculos con el narcotráfico.
Este hecho ha puesto en evidencia su cercanía con figuras clave de su entorno, mientras se mantiene el interés por entender las redes de poder que ha construido en los últimos años. La presencia de López Beltrán en el extranjero, acompañado de personajes influyentes, ha abierto el debate sobre sus relaciones y posibles beneficios obtenidos a través de estas conexiones.
El viaje a Japón, en el que participó junto a varios colaboradores, ha sido el centro de atención, sobre todo por las figuras que lo acompañaron y que, según diferentes fuentes, mantienen una relación cercana con él y con su familia. Entre los acompañantes destaca Daniel Asaf, conocido como “El Gallo”, actual diputado federal y uno de sus principales acompañantes en la visita a Tokio.
Durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, Asaf ocupó cargos como jefe de la Ayudantía en Palacio Nacional, y una investigación de Latinus señala que sería el presunto “facilitador” de una red de tráfico de influencias que gestionaba contratos millonarios, desde medicinas hasta balasto para el Tren Maya.
En enero de 2024, Latinus publicó una serie de audios en los que presuntamente el empresario Amílcar Olán, también cercano a Andy, reveló que gracias a Asaf podía negociar y comunicarse directamente con funcionarios del gobierno de López Obrador. Olán, quien mantiene estrechos vínculos con López Beltrán, ha sido identificado como un empresario tabasqueño con negocios en el sector salud y construcción.
Según información de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), la empresa Romedic, propiedad de Jorge Amílcar Olán, habría recibido contratos millonarios con los gobiernos de los morenistas Mara Lezama en Quintana Roo y Adán Augusto López en Tabasco, destinados a la compra de medicamentos y suministros médicos.
Entre 2020 y 2022, esa compañía recibió más de 490 millones de pesos del extinto Insabi, detallan las investigaciones. Además, Latinus reporta que la venta de balasto para el Tren Maya, gestionada por Olán, le habría generado utilidades por aproximadamente 250 millones en solo dos meses, otro indicio de negocios lucrativos vinculados a esta red.
En el viaje a Tokio también estuvo presente Manuel Guerra, empresario que, según un reportaje, sería socio de Fernando Padilla Farfán, un empresario que recibió contratos con los gobiernos de Tabasco y Chiapas para la compra de medicamentos y renta de unidades médicas a través de la firma FMedical.
Guerra Mabarak, socio de FMedical desde 2010, ha estado involucrado en operaciones similares en Chihuahua, donde operó unidades médicas con la imagen de Andrea Chávez, en lo que algunos consideran un acto anticipado de campaña política. La participación de Guerra en estos negocios evidencia la estrecha relación de ciertos empresarios con la red de López Beltrán.
Otra figura señalada en las investigaciones es Ricardo Pacheco, a quien algunos medios han señalado como presunto prestanombres de López Beltrán. Se le acusa de haber adquirido un penthouse de 22 millones de pesos en Puerto Cancún, propiedad que habría comenzado a usar poco después de la compra.
La denuncia detalla que Pacheco también mantiene amistad con Amílcar Olán y su esposa, y que ha sido visto en diversas ocasiones con personas cercanas a López Beltrán, incluyendo eventos sociales y reuniones en restaurantes. La propiedad en cuestión, ubicada en el complejo Riva, cuenta con múltiples amenidades y un muelle que conecta con un canal de navegación, y fue ocupada por Andy poco después de su adquisición.
En el ámbito político y laboral, se menciona a Marath Baruch Bolaños, actual secretario del Trabajo y Previsión Social, quien no ha sido señalado formalmente por pertenecer a redes de tráfico, pero sí como un amigo cercano de “Andy” que ha incrementado su influencia en el gobierno federal.
Bolaños López fue compañero de López Beltrán en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, donde estudiaron relaciones internacionales y ciencias políticas. Desde 2018, ha ocupado diferentes cargos en la administración federal, incluyendo subsecretario de Empleo y secretario del Trabajo, tras haber sido diputado en la Asamblea Constituyente por Morena en 2016-2017, posición que se atribuye también a una gestión de “Andy”.
Su formación académica incluye una licenciatura en Relaciones Internacionales y estudios de maestría en Estudios Latinoamericanos en la misma universidad. A lo largo de su carrera, ha mantenido una relación cercana con López Beltrán y con otros personajes del entorno político y empresarial en torno a López Obrador.
“Andy” López Beltrán, quien siempre ha expresado orgullo por ser hijo del actual presidente, ha estado envuelto en múltiples polémicas, que van desde su papel en la estructura de Morena hasta su participación en negocios y conexiones familiares.
Durante su paso por la Secretaría de Organización, no logró consolidar una presencia significativa en las elecciones judiciales ni obtener resultados destacados en Veracruz y Durango, lo que ha generado cuestionamientos sobre su influencia y capacidad política.
Su figura continúa siendo objeto de atención, debido a las múltiples relaciones que mantiene con personajes involucrados en negocios, política y posibles actividades ilícitas, en un contexto donde su cercanía con López Obrador lo sitúa en el centro de diversas polémicas.