Claudia Mollinedo reconoce su error tras la controversia por el incidente en un restaurante de la alcaldía Miguel Hidalgo
Tras hacerse viral durante el fin de semana un video en el que cuatro mujeres intentaron exhibir a un restaurante de Polanco supuestamente porque las corrieron después de la hora de cierre, una de las participantes emitió una disculpa por sus declaraciones. La periodista Claudia Mollinedo, quien protagonizó el video en el que denunciaban al establecimiento por no esperar a que se retiraran y por supuestamente ser expulsadas tras pagar una cuenta superior a los 25 mil pesos mexicanos, salió a aclarar su postura.
En su mensaje, Mollinedo afirmó que se equivocó al tratar de exponer al restaurante y admitió que en la grabación se escuchaba con una actitud prepotente. La mujer expresó: “Hola. Hoy decido hablarles desde un lugar de absoluta responsabilidad, vulnerabilidad y respeto. Sé que en las últimas horas mi nombre ha estado en tendencia por un video que subí con unas amigas en el que nos quejábamos del trato en un restaurante.
Ese video fue imprudente y sobre todo mal planteado”.
Reconoció que su error fue subir el video sin explicar claramente la situación, lo cual facilitó que se generaran críticas y malos entendidos. “Entiendo que el video pareció arrogante, altanero y hasta prepotente. Les aseguro que esa no soy yo y quienes me conocen profesional y personalmente, y me han acompañado en estos más de 14 años de trayectoria, lo saben”.
Para Mollinedo, ofrecer disculpas no es suficiente, ya que también asume la responsabilidad de sus acciones, las cuales, afirmó, la llevaron a quedar fuera del medio de comunicación en el que trabaja. “No me creo superior a nadie. No me creo intocable. Nunca fue mi intención usar mi voz para dañar o desprestigiar a nadie.
Si ofendí, si generé una imagen errónea y contribuí de manera involuntaria a un discurso de odio que no representa mis valores, les pido perdón de corazón”.
Durante su intervención, la periodista confirmó su profesión y resaltó la responsabilidad que ello conlleva ante la sociedad. “Voy a tomarme este tiempo para reflexionar y sobre todo para reconstruirme desde la verdad y la empatía”. En sus redes sociales, compartió un video donde expresa sus disculpas, buscando mostrar su arrepentimiento y compromiso con aprender de la situación.
Respecto a lo ocurrido en el restaurante, los hechos tuvieron lugar en Bagatelle Mexico City Restaurant, en la alcaldía Miguel Hidalgo. Desde ese establecimiento, las mujeres grabaron un video en el que relataron que fueron retiradas y escoltadas fuera del lugar después de pagar una cuenta que, según ellas, superaba los 25 mil pesos. En el material audiovisual, una de las mujeres acusó que fueron desalojadas tras pagar esa cantidad y que, además, se molestaron porque estaban vestidas con falda y atuendos de noche.
Otra de las implicadas señaló que eran las 01:03 horas cuando las sacaron del restaurante, con el argumento de que cerraban media hora antes. “Nos corrieron en la calle literal: 01:30 horas, porque tenían que cerrar. Nos prendieron las luces, empezaron a barrer y todavía nos escoltaron a la salida como si fuéramos delincuentes que no hubiéramos pagado la cuenta”, afirmó la protagonista del video.
Las quejas se intensificaron cuando las mujeres aseguraron que han comido en lugares donde la comida es de mejor calidad, menos costosos, y que en ninguna otra ocasión las habían expulsado hasta que ellas mismas decidieran irse. “Hemos comido en lugares mucho más ricos donde hasta el último minuto te respetan la estancia. Nos trataron como si fuéramos unas criminales”, expresó una de ellas.
El video compartido muestra cómo, al percatarse de la salida de un trabajador del restaurante, las mujeres lo enfrentaron y lo trataron de exhibir como la persona que las acompañó hasta la puerta. Sin embargo, en las imágenes se observa y escucha cómo el empleado, de manera cordial, les explica que el establecimiento cierra a la 01:00 horas y que deben retirarse.
Las quejas de las clientas fueron interrumpidas cuando una de ellas notó la salida del trabajador, lo enfrentaron y pretendieron exhibirlo como la persona que las escoltó. El empleado, con amabilidad, les indicó que tenían que salir porque el restaurante cerraba a esa hora.
En respuesta a la controversia, las implicadas han generado diferentes reacciones públicas, pero Mollinedo ha asumido su parte en la polémica, buscando enmendar su postura y reflexionar sobre sus acciones.
