El órgano auxiliar será conformado por expertos para apoyar la estrategia del partido
Morena volverá a contar con un órgano auxiliar integrado por intelectuales, científicos y académicos que colaborarán con la dirigencia nacional en el análisis de temas coyunturales y en la definición de rutas a seguir para el partido. Este consejo, cuya estructura aún no ha sido definida, tendrá un mínimo de 10 y un máximo de 50 integrantes, quienes serán nombrados mediante invitación expresa del Comité Ejecutivo Nacional, presidido por Luisa María Alcalde. Además, podrán participar en su integración miembros del Consejo Nacional, como Carolina Rangel, Andrés Manuel López Beltrán o Alfonso Durazo.
El Consejo Consultivo Nacional será un órgano auxiliar tanto del Comité Ejecutivo Nacional como del Consejo Nacional, con el propósito de fortalecer la labor del partido a través de la incorporación de voces especializadas y diversas. La estructura contempla que sus integrantes, sin funciones ejecutivas, tengan un carácter únicamente consultivo, y serán seleccionados por invitación. Este acuerdo fue aprobado por los consejeros nacionales de Morena, quienes establecieron que la finalidad de este órgano es fortalecer la toma de decisiones en el partido.
Según el documento oficial, la reactivación de este consejo responde a la necesidad de promover mayor uniformidad en las decisiones partidistas de Morena. También busca fortalecer una democracia deliberativa y promover la participación activa de la militancia organizada, elementos considerados esenciales para mantener la continuidad en la defensa de las causas sociales. La reestructuración del consejo refleja, además, la intención de contar con un espacio de deliberación plural, asesoría estratégica y acompañamiento reflexivo dentro del partido.
Este espacio debe contribuir al diseño de políticas, líneas discursivas, orientaciones ideológicas y análisis de coyuntura, desde un enfoque colectivo, crítico y comprometido con la transformación del país. La conformación del consejo también deberá cumplir con criterios de pluralidad, paridad de género, trayectoria, mérito y compromiso con la propuesta de la Cuarta Transformación. La participación en este órgano será por invitación, sin que sus integrantes tengan funciones ejecutivas, sino que su rol será exclusivamente consultivo.
El estatuto de Morena indica que el Consejo Consultivo tendrá también peso en decisiones relacionadas con cargos internos del partido, incluyendo la conformación de la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia, responsable de resolver conflictos internos, y de la Comisión Nacional de Elecciones, que tiene un papel fundamental en la selección de candidaturas y coaliciones. Durante la sesión del 20 de julio, estos temas fueron considerados de los menos polémicos entre los consejeros, en contraste con otras decisiones internas.
Entre los otros acuerdos alcanzados en ese encuentro, se aprobó la territorialización de la defensa de la Cuarta Transformación mediante la creación de comités en cada sección electoral, lo que implica la formación de más de 70 mil organismos en todo el país. En cada sección, al menos cinco militantes deberán integrarlos, nombrando un presidente y un secretario. Alfonso Durazo, presidente del Consejo Nacional de Morena, afirmó que esta estrategia busca mantener vivo y organizado el poder popular en cada barrio, colonia y comunidad del país.
Durazo añadió que no basta con haber ganado en las urnas, sino que es necesario sostener esa victoria diariamente mediante comités seccionales comprometidos y guiados por los mismos principios que llevaron al triunfo al movimiento. Además, advirtió que estos comités no deben organizarse por cuotas ni por amistades, sino por causa, y resaltó que el futuro del movimiento se juega en los principios y en el territorio. Quien no comprenda eso, aseguró, no entiende la profundidad de la lucha ni tiene un compromiso auténtico con ella.
El Consejo Nacional de Morena se llevó a cabo en la Ciudad de México y fue presidido por Durazo, quien destacó la importancia de fortalecer la estructura territorial del partido. Asimismo, se acordó blindar la afiliación para evitar que personas que confunden sumar con simular puedan incorporarse, mediante la nueva Comisión Evaluadora de Incorporaciones.
Este órgano colegiado tiene el objetivo de garantizar que las nuevas afiliaciones se realicen por convicción y no por cálculo, asegurando que cada incorporación contribuya positivamente al proyecto. La Comisión estará conformada por tres miembros de la dirigencia nacional: Luisa María Alcalde, Carolina Rangel y Durazo, además del documentalista Epigmenio Ibarra y el antropólogo Armando Bartra.
También se aprobó un Plan Municipalista cuyo propósito es dotar a los gobiernos del partido con una identidad y sello propios, desde sus raíces en las administraciones municipales. Este plan contempla la creación de una Escuela Municipalista, que brindará capacitación práctica y técnica en temas como gestión de recursos, auditorías, deuda pública, entrega-recepción, planes de desarrollo y ejercicio austero del presupuesto público.
Asimismo, la escuela ofrecerá asesoría para homologar políticas públicas ya implementadas en los municipios y crear herramientas que faciliten una relación cercana con la ciudadanía. El objetivo es fortalecer la presencia y la eficiencia del partido en las administraciones municipales, consolidando así la estructura territorial de Morena a nivel local.
Estas acciones buscan afianzar los principios de la Cuarta Transformación en todos los ámbitos del país y consolidar un liderazgo territorial que contribuya a mantener los logros políticos y sociales del movimiento. La estructura del partido continúa fortaleciendo su base social y organizativa en busca de un cambio profundo y duradero en México.