La nueva legislación en Hidalgo establece derechos y protección para los animales, reconociéndolos como seres con capacidad de sentir y experimentar dolor.
El estado de Hidalgo ha dado un paso importante en la protección animal al emitir un decreto que reconoce a los animales como seres sintientes, una iniciativa pionera en México que refuerza su condición de seres con capacidad de experimentar dolor, sufrimiento y bienestar. La legislación, publicada recientemente en el Diario Oficial del Estado, busca fortalecer la protección de los derechos animales y promover un trato más ético y responsable hacia ellos en todos los ámbitos de la sociedad.
Este decreto establece que los animales no son objetos ni bienes muebles, sino seres con sensibilidad y derechos propios, lo que implica una transformación en la manera en que se legisla y se regula su bienestar. Entre sus principales disposiciones, la ley prohíbe prácticas que causen sufrimiento innecesario, como el maltrato, la crueldad y la explotación, y obliga a las autoridades y a la ciudadanía a garantizar su protección en diferentes escenarios, desde la vida doméstica hasta las actividades comerciales y recreativas.
La iniciativa también contempla la creación de mecanismos especializados para atender denuncias de maltrato y garantizar la reparación de los daños a los animales afectados. Además, promueve campañas de concientización y educación para fomentar una cultura de respeto y empatía hacia los seres vivos con capacidad de sentir. La legislación incluye sanciones económicas y penales para quienes violen estas disposiciones, buscando disuadir cualquier forma de crueldad.
El gobernador de Hidalgo expresó que esta medida representa un avance en la justicia social y en la protección de los derechos de los animales, alineándose con las tendencias internacionales que reconocen su capacidad de sentir. Asimismo, resaltó la importancia de sensibilizar a la población sobre la responsabilidad que implica tener una relación ética con los animales y de promover prácticas responsables en la tenencia, el comercio y la protección de la fauna.
Diversas organizaciones civiles y defensores de los derechos animales han celebrado esta iniciativa, considerándola un paso decisivo para erradicar el maltrato y fortalecer la protección legal de los seres sintientes en la región. Expertos en bienestar animal resaltan que la legislación establece un marco legal más sólido para la protección y el respeto hacia los animales, facilitando acciones concretas por parte de las autoridades y la sociedad civil.
Este decreto coloca a Hidalgo a la vanguardia en la protección de los derechos animales en México, estableciendo un precedente que podría inspirar a otros estados a seguir un camino similar en el reconocimiento de los animales como seres con derechos y sensibilidad. La medida también busca promover una convivencia más armónica entre humanos y animales, basada en el respeto, la empatía y la responsabilidad compartida.