Inquietud en la bancada por las repercusiones del escándalo en torno a Hernán Bermúdez Requena
En la bancada de Morena en el Senado existe preocupación por la forma en que ha evolucionado el escándalo relacionado con el ex secretario de Seguridad Pública en Tabasco, Hernán Bermúdez Requena, y las posibles consecuencias para el coordinador de la bancada, Adán Augusto López Hernández, así como para el movimiento de la 4T. A pesar de que inicialmente hubo un respaldo por parte del grupo, liderado por la senadora Guadalupe Chavira, con el paso de los días, la actitud de los senadores de Morena se ha vuelto más cautelosa. En declaraciones hechas ayer en Durango, la senadora Lilia Margarita Valdez mencionó que cada individuo debe asumir su responsabilidad, mientras que su colega de bancada, Manuel Huerta, afirmó que la investigación debe llevarse hasta el final, ya que la constante campaña mediática está perjudicando al movimiento. Gran parte de los integrantes de la bancada de Morena no se han pronunciado sobre el futuro del también presidente de la Junta de Coordinación Política, mientras que el PAN ya ha presentado una denuncia penal en su contra, y tanto priistas como emecistas han exigido su renuncia.
Otra preocupación para los senadores de Morena es la falta de una respuesta directa de López Hernández a las acusaciones en su contra. Durante la sesión de la Comisión Permanente el pasado miércoles, los opositores exigieron discutir este tema, pero los miembros de Morena y sus aliados impusieron su mayoría para evitarlo. En su defensa, el presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña, reiteró ese día que el tabasqueño no enfrenta ninguna acusación y no tiene motivo para renunciar. El resto de la bancada está a la espera de que se aclaren las responsabilidades, según Félix Salgado.
Por otro lado, la presidenta Claudia Sheinbaum afirmó ayer que no da instrucciones a personas fuera de su gabinete, al ser cuestionada sobre las imágenes de legisladores de Morena vacacionando en Europa. Durante su conferencia matutina, Sheinbaum subrayó que el poder debe ejercerse con humildad y que los viajes no son un problema si se financian con recursos propios. “Yo no doy instrucciones más allá de mi gabinete para las actividades que debemos llevar a cabo en función de nuestro plan de gobierno”, mencionó. Añadió que cada actor político está sujeto a la evaluación de la ciudadanía, pero que la 4T es sólida y tiene claridad en sus principios.
