Ejército refuerza seguridad en Michoacán ante extorsiones en sector limonero
El gobierno de Michoacán despliega al Ejército y la Guardia Nacional en el Tianguis Limonero de Apatzingán, en un esfuerzo por frenar la creciente ola de extorsiones que afecta a los productores de limón, quienes mantienen un paro laboral.
El gobierno de Michoacán ha tomado medidas drásticas para enfrentar la creciente violencia y extorsión en la región limonera de Tierra Caliente, desplegando a más de 400 elementos del Ejército y la Guardia Nacional en el Tianguis Limonero de Apatzingán. Esta intervención se da en respuesta a un paro laboral iniciado por los productores de limón, quienes se niegan a seguir pagando las elevadas cuotas exigidas por grupos del crimen organizado.
La región de Tierra Caliente, conocida por su alta producción de limón, se ha visto gravemente afectada por las actividades delictivas de organizaciones criminales que extorsionan a los productores, empacadores y distribuidores. Las cuotas, que anteriormente eran de 20 centavos por kilogramo, han aumentado hasta un peso por kilogramo, lo que ha provocado una parálisis en la recolección y comercialización del fruto.
«No podemos seguir trabajando bajo estas condiciones; estamos perdiendo todo lo que hemos construido durante años»
Comentó un productor de Apatzingán que prefirió permanecer en el anonimato por temor a represalias. Por su parte, el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla declaró: «No permitiremos que el crimen organizado siga oprimiendo a nuestros agricultores; estamos aquí para proteger su trabajo y garantizar su seguridad».
Datos y estadísticas:
En los últimos días, el precio del kilogramo de limón ha pasado de 25 a 45 pesos en los mercados locales, un incremento directamente relacionado con la disminución de la oferta debido al paro. Michoacán, que produce más del 22% del limón en México, se encuentra en una situación crítica que podría afectar el suministro nacional de este producto.
Antecedentes:
La situación de inseguridad en Michoacán no es nueva; durante años, la región ha sido un campo de batalla entre diversos cárteles que buscan controlar las lucrativas actividades agrícolas. La intervención del gobierno estatal en el Tianguis Limonero de Apatzingán es un esfuerzo más en la larga lucha por recuperar la paz en esta área, que sigue siendo uno de los principales focos de conflicto en el país.