Es muy bien sabido el conflicto que hay entre el gobernador Samuel García partidario de MC con los partidistas del PRIAN, este conflicto no ha permitido el correcto funcionamiento de la república en el estado de Nuevo León, pues es fundamental que el poder ejecutivo y legislativo, trabajen de la mano para brindar la mejor administración a la ciudadanía. Algo que no está sucediendo desde noviembre del 2023, cuando Samuel García no entrego el presupuesto al congreso. Teniendo que recurrir al presupuesto del año pasado y así se ha mantenido durante todo el mandato del gobernador de Nuevo León.

¿Estará esperando el gobernador que las aguas del congreso se tornen más naranja y guinda para cumplir con sus funciones?, o ¿hay algún plan maquiavélico detrás de esto?

El conflicto del gobernador con su congreso es algo que se ve diario como un gato y un ratón, recordemos cuando Nuevo León tenía 4 gobernadores en el 2023, eso sí que fue interesante, pues la constitución de Nuevo León marcaba que el congreso del estado debe ser el encargado de nombrar a un gobernador interino en caso de que el gobernador suspenda sus funciones por cualquier motivo.

Aun así, el gobernador solicito que su secretario de gobierno fuera nombrado como gobernador interino, el Bronco no tuvo problemas en lograrlo, pues él siempre fue cómplice de los partidos en el poder, pero nuestro querido gobernador Samuel García representaba una fuerza opuesta a la anterior fuerza política. Por eso no le salió la jugada, el congreso desconoció a su secretario de gobierno y nombró a José Arturo Salinas Garza presidente del Tribunal Superior de Justicia del estado. Ahí se evidenció que la nueva constitución no la leyó ni el gobernador ni los PRIANISTAS.

Me gusto mucho el comentario que dijo el gobernador sobre este primer intento de tomar el estado por parte de los PRIANISTAS:

«Lo hicieron rey»

Y no está tan equivocado, pues José Arturo Salinas Garza ahora era el máximo mandatario del poder ejecutivo en el estado, máximo mandatario del poder judicial en el estado y tenía el apoyo de la mayoría relativa del poder legislativo. Pues de esta forma, sin quererlo, el PRIAN nombró a un rey en Nuevo León. Larga vida a José Arturo Salinas Garza. Hasta que se dieron cuenta de su error.

Al darse cuenta de la controversia constitucional que ellos mismo habían provocado, nombraron a Luis Enrique Orozco Suárez gobernador interino, pero Samuel García también jugó sus cartas y regreso como gobernador y nombró de manera oficial a su secretario de gobierno Javier Navarro Velasco gobernador interino. Entonces Nuevo León contó con 4 gobernadores en el 2023. El rey, el secretario de gobierno, el vice fiscal y nuestro querido gobernador Samuel García.

Este solo es un ejemplo de lo que está sucediendo con la ley desde que Samuel García entro al poder, ¿será que por fin el gobernador este a gusto con su congreso este octubre del 2024 y por fin cumpla con sus funciones?, o ¿seguirá moldeando la ley a sus intereses políticos?

La lluvia tropical Alberto causó daños millonarios al estado de Nuevo León y si el gobernador anda conflictuado con el congreso que aprueba los presupuestos, ¿cómo le va a hacer para reconstruir al estado sin dinero otorgado por el congreso? ¿Será que Tesla enviará dinero ahora que si tenemos agua?

Esperemos que esta dinámica poco funcional termine este octubre con el nuevo congreso, sin nada más que agregar, aquí se retira su amigo el Camaleón.