El gobierno de Claudia Sheinbaum oficializa la designación de la exgobernadora de Sonora, en un acto que genera controversia por su pasado político
El gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum anunció la designación de Claudia Pavlovich Arellano como embajadora de México en la República de Panamá. La resolución fue formalizada el 4 de agosto a través de un oficio enviado por la Secretaría de Gobernación al Senado, instancia encargada de ratificar oficialmente el nombramiento. La confirmación por parte del Congreso es un paso obligatorio en el proceso diplomático para que Pavlovich asuma formalmente su cargo en el país centroamericano.
El documento oficial, titulado “Acuerdo a la Secretaría de Relaciones Exteriores”, indica que la presidenta Sheinbaum “ha tenido a bien nombrar a la C. Claudia Artemiza Pavlovich Arellano, como Embajadora Extraordinaria y Plenipotenciaria de México en la República de Panamá”. Este acto refleja la confianza del Ejecutivo en la trayectoria de Pavlovich, quien en su momento fue gobernadora de Sonora y exmiembro del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
El anuncio de su nombramiento fue adelantado por la senadora Lilly Téllez, quien destacó que Pavlovich defendió a los responsables del caso Guardería ABC. La exgobernadora ha sido señalada por su gestión en ese incidente, en el que murieron 49 menores de edad en un incendio ocurrido en 2009. La desconfianza generada por su papel en ese asunto ha sido utilizada por Morena como argumento para criticar a sus adversarios políticos, particularmente a Felipe Calderón, expresidente y exlíder del PAN.
Claudia Pavlovich inició su carrera en la función pública en el año 2000, cuando asumió el cargo de regidora en Hermosillo. Posteriormente, fue diputada local de Sonora de 2012 a 2015, año en que fue electa como gobernadora de la entidad. Su administración en Sonora se extendió hasta 2021, período durante el cual enfrentó diversas acusaciones de corrupción y desvío de recursos.
Entre las acusaciones más graves se le señala por haber desviado aproximadamente 140 millones de pesos a una red de empresas fantasma, utilizadas en la operación Safiro del PRI. Este esquema de financiamiento ilegal estuvo vinculado a campañas electorales del partido en varias entidades, con participación de gobernadores y funcionarios del PRI, según informes de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI). La relación de Pavlovich con estos hechos ha sido motivo de controversia y ha afectado su imagen pública.
A pesar de las acusaciones, en enero de 2022, Pavlovich fue nombrada por el entonces presidente Andrés Manuel López Obrador como cónsul en Barcelona. Esta decisión generó rechazo en el Partido Revolucionario Institucional (PRI), que la expulsó de sus filas en junio del mismo año, tras aceptar el nuevo cargo diplomático. La designación fue vista por sus críticos como una recompensa política por su lealtad, a pesar de su pasado controversial.
Organizaciones de derechos humanos en España también manifestaron su rechazo a su nombramiento como cónsul, argumentando que su participación en el caso Guardería ABC la descalifica para cargos diplomáticos. La tragedia, en la que fallecieron 49 menores de edad, sigue siendo un asunto pendiente en la agenda de derechos humanos en México, y su implicación en el caso ha sido motivo de críticas internacionales.
En conclusión, la designación de Claudia Pavlovich como embajadora en Panamá ha generado controversia en el ámbito político y social. Mientras algunos la ven como una recompensa por su lealtad política, otros cuestionan su idoneidad debido a las acusaciones y su historia en la administración pública. Este nombramiento reafirma la estrategia del gobierno de Morena de consolidar su influencia en la diplomacia mexicana, independientemente de los antecedentes de los candidatos seleccionados.