Análisis de UBS señala que, pese a incertidumbres, el acuerdo seguirá vigente, aunque con posibles ajustes restrictivos
El Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (TMEC) continuará siendo un pilar fundamental de la integración regional más allá de 2026, aunque enfrentará una revisión prolongada y polémica que podría traducirse en condiciones más restrictivas para México y Canadá. Así lo estima UBS, banco suizo especializado en análisis de inversión, en su informe más reciente dedicado a las perspectivas económicas del país.
A pesar de las posibles volatilidades, UBS sostiene que la alta integración entre las economías del norte y los beneficios mutuos que derivan del acuerdo hacen improbable una ruptura total. La firma de análisis mantiene la confianza en que el TMEC seguirá siendo vigente, aunque advierte que las condiciones para México podrían endurecerse en el proceso de revisión.
El proceso formal de revisión del tratado comenzará el 1 de octubre de 2025, cuando se abrirá un período de consulta de 90 días. Posteriormente, en enero de 2026, la Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos (USTR) deberá presentar al Congreso un informe con los objetivos de dicha revisión, conforme a las leyes estadounidenses.
Aunque el TMEC no contempla una renegociación total, declaraciones recientes de funcionarios de Estados Unidos, incluido el secretario de Comercio, Howard Lutnick, sugieren que Washington podría acercarse a las conversaciones con ambiciones más amplias. Esto ha generado preocupación en México respecto a posibles condiciones más duras en las futuras negociaciones.
El análisis también menciona que la imposición de un arancel del 30 % sobre bienes mexicanos resultó sorprendente, especialmente considerando el enfoque constructivo que México ha mantenido en las negociaciones. En ese sentido, las autoridades mexicanas estiman que el 87 % del comercio con Estados Unidos se beneficia de las protecciones del TMEC, mientras que las autoridades estadounidenses sitúan esa cifra en torno al 75 %.
No obstante, el informe señala que el arancel efectivo promedio sobre las exportaciones mexicanas a Estados Unidos se ubica actualmente entre 7 % y 8 %, muy por debajo del 15 %, mínimo para la mayoría de los países afectados por esta tarifa. Esto indica que México mantiene una posición comercial relativamente favorable, en gran medida gracias al acuerdo.
En cuanto a la inversión, UBS advierte que la confianza en el mercado mexicano se ha visto afectada, pues la inversión extranjera directa ha disminuido de manera constante desde principios de 2024. Los analistas recomiendan que México adopte un enfoque estratégico y reflexivo, centrado en preservar lo que funciona, modernizar áreas necesarias y utilizar la revisión del TMEC para impulsar la inversión y la certidumbre a largo plazo.
El informe también señala que, pese a la posible volatilidad, la posición de México como principal socio comercial de Estados Unidos sigue respaldando la fortaleza del peso. Se estima que el tipo de cambio cerrará en 18.8 pesos por dólar al final de 2025. Sin embargo, los bonos soberanos mexicanos en dólares continúan cotizando con diferenciales más amplios que otros bonos con calificación BBB, reflejando preocupaciones internas y por la incertidumbre comercial.
Finalmente, una evaluación de Oxford Economics indica que un eventual incremento de los aranceles estadounidenses, del 25 % al 30 %, no tendría un impacto significativo en el comercio si se mantienen las exenciones para productos protegidos por el TMEC y el contenido automovilístico estadounidense.